[Recopilación] Recomendaciones y reseñas de libros

Empezamos con el que durante mis años de prepuber fue mi libro favorito. La Ratonera trata de la reunión de diversos personajes en la casa de huéspedes de Monkswell Manor, que quedan atrapados por una intensa nevada. Durante dicho encierro, se produce el asesinato de uno de los protagonistas, hecho que deriva en una investigación policial a cargo del Sargento Trotter, un detective de la policía bastante arrogante que busca encontrar la relación de este suceso con un crimen acaecido en Culver Street, Londres.

Sin querer hacer mucho hincapié en los entresijos de la historia para no incurrir en un spoiler que destroce un argumento tan entretenido de leer, resumo mi opinión en que Christie, maestra de este género, mantiene en todo momento la intriga tratando tanto individual como coralmente a todo el elenco, ahondando en las distintas personalidades, muy marcadas, de cada uno de ellos. Con el desarrollo de la historia y de las subtramas que se generan, se presenta la duda sobre quién es el verdadero asesino, puesto que todos ocultan hechos de su vida que impiden descartar posibles responsables.

Las descripciones de las escenas son concisas, presentando los detalles clave para poder imaginar (o escenificar) los ambientes y los actos suceden de una manera rápida. A veces, inclusive, sin dejar reposar lo que acaba de suceder (cosa entendible por el formato teatral).

Este frenetismo se observa especialmente en la resolución del caso, cuando se revela la verdad de una forma casi atropellada en colación con el clímax de la tensión, descubriéndose en el último instante relaciones clave de los protagonistas con el asesino y revelándose la identidad real de este y formando el que es, en mi opinión, el mayor error de esta obra, puesto que Christie se saca de la manga tanto quién es el criminal como con quiénes estaba vinculado.

Y aquí, uno de mis TOP 3 de libros. Una nueva aventura fantástica, muy del estilo de la escritora valenciana que nos sumerge en un mundo donde el ángel Ahriel, protagonista de la obra, vela por la seguridad y el aprendizaje de la joven reina de Karish, Marla, para que los humanos convivan en armonía. Sin embargo, la soberana clama venganza ante otros reinos por haber perdido la gloria de que gozaba anteriormente su tierra, de modo que, con ayuda de su mano derecha y capitán de la guardia, Kab, engaña a su protectora para capturarla, atarle las alas con ayuda de magias oscuras y encerrarla en Gorlian, una prisión mágica donde se encerraba a los criminales del reino, y así tener vía libre para entrar en guerra con el reino de Saria.

Ahriel, sin posibilidad de volar (perdiendo así su naturaleza de ángel), se ve inmersa en un mundo extraño, con ecosistemas extremos y rodeada de terribles criminales y engendros feroces, debiendo bajar al barro (tanto figurada como literalmente) para poder preservar su vida. En este objetivo tiene un peso muy importante Bran, un hombre ingenioso que busca solventar sus necesidades con constantes intercambios de información y materiales, que rescata al ángel cuando esta desfallece tras un esfuerzo titánico por resguardarse del primero de los monstruos con que se encuentra, la instruye en el "arte" de la supervivencia en esta cárcel y comparte con ella meses, llevándola a los confínes del rey del lugar, un gran sapo verrugoso autoproclamado "Rey de la Ciénaga".

Tras un sinfín de desventuras, Ahriel, completamente acostumbrada a la vida de un humano, acaba desarrollando sentimientos amorosos hacia su compañero, y el asesinato de su amado le da la motivación para hacer de Gorlian su mundo, asesinando al mencionado sapo para proclamarse nueva Reina de la Ciénaga.

Sin embargo, es la aparición de una serie de personajes lo que motivará al ángel caído a escapar de la prisión y pararle los pies a su antigua protegida, quién está completamente involucrada en un rito de magia oscura con el que pretende liberar el poder del Devastador, un demonio que fue sellado por los ángeles, para poder convertirse en la más poderosa de las monarcas. Y es Ahriel quien consigue derrotarlo, tras una lucha de proporciones épicas, y restablecer la paz en el mundo de los humanos.

El primer libro inicia la historia. Relata el viaje de Adhara -una adolescente hija de un elfo y una humana- al reino de Lesath, en el que vive arriesgadas historias y descubre misterios tenebrosos. Adhara, hija de un elfo y una humana; decide a los veinte años abandonar el bosque élfico donde vive con sus padres y viajar para conocer Lesath. Allí residen sus abuelos maternos. La joven descubre que las cosas no son como parecen, que el pacífico reino esconde misterios tenebrosos. De la mano del valiente Aiden, Adhara vivirá las más arriesgadas historias en su intento de vencer el mal que encarnan los miembros del Concilio de los Oscuros, que gobiernan secretamente Lesath.

Junto que el mago Zul y su hermana (y otros personajes menos recurrentes) emprenden la búsqueda hacia un elfo antiguo que ha desaparecido entre los humanos. Él podría ser la clave para desarmar el concilio oscuro, quizá convencer a los elfos de ayudar al reino o él mismo poner fin a la maldad. Lo mejor del primer libro (en mi opinión) es el final: Descubren que el elfo había sido encerrado y torturado durante años. Cuando por fin lo liberan, lo primero que hace sin bacilar es asesinar a quien le torturaba traicionando su propia naturaleza de elfo, para luego decirle a sus libertadores que él no es la salida que ellos necesitan, y se suicida ante sus ojos. Esto hace replantearse lo que han sacrificado para esta causa... pero aquí termina este libro y no seguiré arruinando la sorpresa con los otros tomos.

En Positivo​