[Poema] La Paradoja de la Cuna

La Paradoja de la Cuna

Por JV Lance

Y pensar que hace unos siglos,
La gente creía que la tierra era el centro,
Y ahora sabemos que tal cosa no existe.
Sé que no pude nacer cuando hubiese querido,
Pero aún en este momento de calma,
Cuando la eterna noche todavía no se asoma,
Puedo sentir en mi corazón el miedo,
La esperanza, la emoción y el suspenso
Que deberán vivir en un futuro nuestros hijos.
¿Es que tenemos que esperar a que el creador venga?
¿Por qué?, ¿De qué me están hablando?
Si hay un cosmos inmenso allá fuera,
¿Con que razón debemos privarnos de ello?
Sé que hasta ahora solo podemos divagar,
Y que tal vez, nos toqué morir en la cuna,
Pero eso no es excusa para no intentarlo
Para dejar de soñar con algún día,
Poder mirar a la tierra que nos vio nacer,
Y decirle gracias por soportarnos,
Y despedirnos, dejándola descansar de una vez.
Me siento, miro al cielo nocturno,
Y no puedo evitar suspirar de emoción,
Y sentir esa esperanza de que mañana
En alguno de esos puntos brillantes y lejanos,
Uno de mis parientes mire al agonizante sol de lejos,
Y diga: Allí esta nuestro origen,
Allí surgió todo lo que fuimos, somos y seremos;
En ese lugar pensamos alguna vez en Dios
Y fue allí en donde surgió nuestra pasión,
Por avanzar, por descubrir, por superarnos.
Allí, en ese pequeño punto de un azul pálido.
¿Será posible?, ¿Lo lograremos algún día?
No lo sé, y jamás podré saberlo,
Dado que nací en una época en la que apenas,
La ventana al espacio comienza a abrirse.
Primero nos tocará volver a la luna,
Luego seguir hasta el rojizo marte,
Y así con cada uno de los ocho planetas,
Que dio a nacer nuestra estrella madre.
¿Y luego?, ¿Qué sucederá?
Será allí cuando la realidad se muestre,
Y descubramos si podemos seguir,
Si podemos saltar a esa inmensa noche,
Punteada por las grandes creadoras de vida,
O si deberemos quedarnos a perecer.
Como si el creador nos dijese,
No se les será permitido alcanzar el cielo,
Porque con la tierra nacisteis…
Y con la tierra os tocará morir…
Admito que la idea es terrorífica,
Pero a la vez fascinante.
Si lo logramos, estaremos un paso más cerca,
De alcanzar el punto final de esta carrera,
Y de convertirnos en dioses.
Pero si no podemos escapar jamás de la cuna,
Deberemos pararnos en la playa del gran océano,
Y fascinarnos ante su inmensidad,
Y ante el hecho de que nos habrá superado.
¿Dónde está el bien y el mal?
Esa lucha entre dos bandos que algunos pregonan.
¿Dónde está la perdición y la salvación?
A la hora de la verdad, ninguna existe,
Por qué la naturaleza podrá ser atemorizante,
Imponente, basta y peligrosa,
Pero nunca será malvada.
Y sobre todas las cosas habidas y por haber,
Nunca dejará de ser hermosa.

…

Este es el desahogo de un simple mortal,
Que soñó con viajar a las estrellas
…