Aquí la gente está confundiendo que hable o no con que tenga personalidad o no.
Para empezar, hay que dar por hecho que el jugador va a empatizar. Quiero decir, es el trabajo de los escritores: hacer que a la gente le importe lo que están contando. La cáscara vacía, aunque potencia la identificación (que no es lo mismo), es una técnica barata y algunos discutirían que hasta de novato.
Ahora, los personajes mudos no siempre son cáscaras vacías, y en este tema todo el mundo está implicando eso. Puedes tener un personaje mudo con personalidad y transfondo propio. Los Dragon Quest, sin ir más lejos, son un ejemplo genial de esto, igual que algunos Zelda en menor medida.
So básicamente, dejando de lado narrativa 101, puedes hacer bien los dos. Lo importante es que tenga personalidad e historia propia, elijas cual elijas. Ahora, puestos el uno frente al otro, yo siempre preferiré los que hablan.