Ay, de mi Llorona, Llorona, Llorona... de un campo lirio.
El que no sabe de amores, Llorona, no sabe lo que es martirio.
No sé qué tienen las flores, Llorona, las flores de camposanto... que cuando las mueve el viento, Llorona, parece que están llorando.
Tápame con tu rebozo, Llorona, porque me muero de frío.