Tú lo has querido. Hagamos una batalla espacial, los demás ya se ocuparán de los asuntos terranos. Dices manejar la pluma... ¿Puedes demostrarlo? Tú decides momento y modalidad.
Cállate. Tú te quemaste con lava, vencido por alguien menos poderoso que tú, y dependes de máquinas implantadas en tu cuerpo; mientras que yo controlé una Gema del Infinito sin despeinarme.